Durante mucho tiempo he compartido en el medio del bienestar y terapia holística, con personas que fueron menoscabadas desde su infancia por sus propios padres, merma que fue utilizada por inescrupulosos para usar sus vidas y que lastimosamente se ha repetido a lo largo de las décadas y diferentes culturas del mundo.
Esa soledad mal sentida, vista como carencia y no como un medio de autoconocimiento, ha sido utilizada por inescrupulosos, que viendo un ser indefenso crean una dependencia y manipulación tan grande, que en muchas ocasiones ha terminado en suicidios y abusos consecutivos en el tiempo.
¿Cómo puedo entonces trabajar mi amor propio, esa sensación de que estoy incomplet@, para no caer en ese tipo de engaños? la verdad es que no tengo un recetario o secuencia de actos psicomágicos al que se pueda recurrir en caso de que alguien pueda estar pasando por esta situación, lo que sí puedo hacer, es evidenciar algunas señales que da el manipulador con rostro de maestro y también lo que debo trabajar interiormente para alejarme y/o distinguir este tipo de hechos.
El falso maestro, se muestra puro, muy empático y asequible, astuto, extremadamente sabio, tienen respuestas y alivios para todos los males, son dueños de la verdad absoluta, aunque aparentemente estén llenos de dudas. Son elitistas, y expertos en alguna materia humanista que suelen aprovechar al máximo para atraer víctimas con la intención de crear un séquito que le mantenga financieramente y obviamente sacie sus perversiones. Comúnmente tienen rasgos de delirio místico, más común es que tienen a un/a consorte que realza sus maravillas.
«El falso maestro, se muestra puro, muy empático y asequible, astuto, extremadamente sabio, tienen respuestas y alivios para todos los males, son dueños de la verdad absoluta, aunque aparentemente estén llenos de dudas»
El falso gurú huele la carencia, la siente cuando compartes tus sentires más profundos en un grupo, cuando ve en tus redes sociales escritos quejándote y compartiendo, insisto, aspectos privados como por ejemplo, que lo estás pasando mal, que tuviste una ruptura, que tu familia te maltrata, etc.. Él sabe cómo manipular las emociones, trabaja en eso, disfraza la ayuda y la empatía, que manifiesta entregando una supuesta exclusividad en cuanto a enseñanzas y conocimientos que entrega a la víctima, ejerciendo poco a poco control en su entorno, también lo hacen a través de redes sociales, mostrándose como los primeros en algo, los que llevan cierta cantidad de tiempo practicando este tipo de métodos infalibles para alcanzar la sanación espiritual.
«Él sabe cómo manipular las emociones, trabaja en eso, disfraza la ayuda y la empatía, que manifiesta entregando una supuesta exclusividad en cuanto a enseñanzas y conocimientos que entrega a la víctima»
El victimario aprovecha cada oportunidad que tiene para alejarte de tus cercanos, advirtiendo por ejemplo, que tu entorno está impuro o que no están a tu altura y que debes evolucionar mediante prácticas de ejercicios exclusivos impartidos solo por ellos, para elevar tu energía y poder. Él te recuerda en todo momento cuán especial eres, lo que puedes llegar a hacer con la grandeza que hay en tu interior gracias a él y sus enseñanzas. (También creo que todos tenemos un poder intrínseco al amor dentro de nosotros, que por derecho propio debemos proporcionarnos, pero para ser armónicos y felices, no para engrandecer el ego y las malas prácticas de otros).
Es cierto que de alguna forma se tiende a idealizar al facilitador de disciplinas holísticas, que se dedica a entregarle herramientas a otro para sanar y que por opción de vida dedica su tiempo y trabaja en ello, no debemos estigmatizarlos, más bien entender que no es su función cargar con carencias, fantasmas y sombras ajenas, que es una persona que come y paga cuentas como cualquier otro ser humano y que por derecho puede ejercer la labor que le plazca.
La idea de transmitir técnicas y/o métodos holísticos a otros es precisamente, que éste se involucre consigo mismo, con el compromiso que se necesita para adquirir conocimiento, disciplinar, aplicarlo, estudiarlo y por sobre todo vivirlo.
Entonces, es necesario por bien común y por sobre todo de quienes comienzan a acercarse a su espiritualidad, primero, ser conscientes de lo que buscan dentro del mundo holístico, teniendo muy en cuenta que estas disciplinas en sí no buscan sanar enfermedades, ni dolencias, sino más bien, sus técnicas son utilizadas como herramienta para la terapia, conscientemente y muy de la mano con la ciencia, sobre todo de los síntomas asociados al estrés, padre y precursor de las enfermedades más comunes que atañen al ser humano.
En el medio actual en el que nos desenvolvemos, es preciso asistir a chequeos médicos que nos muestren el estado de salud de nuestro cuerpo y nuestra mente. De esta forma podremos abordar nuestros sentires de forma responsable, sabiendo que la magia está en el hacer, está en la disciplina, en la constancia y en el aceptar la vida, sabiendo que en nuestras manos está el mejorar y darle el rumbo que queramos a nuestro existir.
Estando frente a frente con nuestros fantasmas, miedos y oscuridades, enfrentando muchas veces el juicio de valores de otros asiduos a la espiritualidad es que podemos hacernos cargo de nuestras vidas de forma consciente, sabiendo que vivimos en sociedad, que todo cuanto hacemos repercute en otros, ser partícipes de esta conciencia colectiva es de una tremenda responsabilidad y compromiso que vale la pena tomar.
Se que puede ser atemorizante ese lado salvaje que vive dentro de nosotr@s, pero no seamos presos del desconocimiento y el egocentrismo que como humanos nos toca vivenciar.
Se libre, conócete y acepta tu esencia, trabájala y nutre tu existencia con aquello que vibre alto y te haga sonreír.